Este 30 de septiembre marcó el último día de Andrés Manuel López Obrador como presidente de México, y en un acto simbólico, cerró su mandato firmando dos importantes reformas constitucionales. Las reformas, impulsadas por su administración y aprobadas por el Congreso, buscan fortalecer a la Guardia Nacional y proteger los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos.
López Obrador comenzó su despedida explicando la importancia de la reforma a la Guardia Nacional, una institución creada bajo su gobierno para garantizar la seguridad pública. Con más de 130 mil elementos y 500 cuarteles construidos, AMLO destacó que esta fuerza ya se encuentra consolidada. «La Guardia Nacional es una institución acreditada para proteger a los ciudadanos, y con esta reforma pasa a formar parte de la Secretaría de Defensa Nacional, lo que garantiza su permanencia, disciplina y manejo honesto», señaló el mandatario antes de firmar el decreto.
Durante el evento, estuvo acompañado por el secretario de Defensa, Luis Cresencio Sandoval, y la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, quienes atestiguaron la firma del documento que formaliza este cambio institucional.
Por otro lado, AMLO también destacó la reforma sobre los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos. «Esta es una reforma que tiene que ver con el México profundo, con nuestras raíces y la verdad más íntima de nuestro país. Ahora, los derechos de estas comunidades están protegidos por la Constitución», subrayó el presidente.
Ambas reformas, presentadas originalmente el 5 de febrero de 2024, en el aniversario de la Constitución, fueron finalmente aprobadas en septiembre, en los últimos días de la legislatura del sexenio de López Obrador.