Tres personas fueron imputadas en relación con la muerte del cantante británico Liam Payne, quien falleció el 16 de octubre tras caer del tercer piso de un hotel en Buenos Aires. La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°14 presentó cargos por abandono de persona seguido de muerte, suministro y facilitación de estupefacientes.
Uno de los acusados, quien acompañaba regularmente al músico durante su estadía, enfrentará cargos por los mismos delitos. El segundo imputado es un empleado del hotel Casa Sur, acusado de haber suministrado cocaína a Payne, y el tercero es un proveedor de estupefacientes en dos ocasiones previas a la caída.
La investigación incluyó más de 800 horas de grabaciones, análisis de teléfonos y pruebas toxicológicas, que revelaron que Payne tenía rastros de alcohol, cocaína y un antidepresivo en su cuerpo. Las pericias confirmaron que las lesiones eran consistentes con una caída accidental, y se descartó cualquier intervención física por parte de terceros.