Ciudad del Vaticano, 8 de mayo de 2025 — A las 18:07 horas (hora local), la tradicional fumata blanca emergió de la chimenea de la Capilla Sixtina, señal inequívoca de que la Iglesia Católica ha elegido a su nuevo Papa. Este acontecimiento marca la elección del 267º sucesor de San Pedro, tras el fallecimiento del Papa Francisco el pasado 21 de abril.
Un Cónclave Histórico
El cónclave, compuesto por 133 cardenales electores, inició sus deliberaciones el 7 de mayo. Tras cuatro votaciones, se alcanzó el consenso necesario para la elección del nuevo pontífice. La rapidez del proceso refleja una notable unidad entre los cardenales, similar a la elección de Benedicto XVI en 2005.
Emoción en la Plaza de San Pedro
Miles de fieles congregados en la Plaza de San Pedro estallaron en júbilo al observar la fumata blanca. Las campanas de la Basílica resonaron, acompañando los vítores y aplausos de los presentes. Este momento de celebración y esperanza fue compartido por creyentes de todo el mundo, quienes siguieron el evento a través de transmisiones en vivo y redes sociales.
Expectativa por el Anuncio Oficial
Tras la señal de la fumata blanca, se espera que el cardenal protodiácono, Dominique Mamberti, pronuncie la tradicional fórmula “Habemus Papam” desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, revelando al mundo la identidad del nuevo Papa y el nombre que ha elegido para su pontificado.
Este anuncio será seguido por la primera bendición “Urbi et Orbi” del nuevo pontífice, marcando el inicio oficial de su liderazgo espiritual sobre más de 1.300 millones de católicos en todo el mundo.
La elección del nuevo Papa ocurre en un momento crucial para la Iglesia, que enfrenta desafíos contemporáneos y busca continuar las reformas iniciadas por el Papa Francisco. La comunidad católica global aguarda con esperanza y expectativa las primeras palabras y acciones del nuevo líder espiritual.
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