¡A ponernos VIVOS para preparar el Altar a nuestros MUERTOS!
Nuestro país, año tras año celebra el Día de Muertos ¡a lo grande! con adornos, deliciosos platillos, baile y simpáticos versos «calaveritas,» se busca agradar a ese ser que partió a otro plano con todo lo que en vida disfrutó.
El Altar de muertos es una tradición imprescindible en la vida de los mexicanos. El Altar original consta de siete niveles sin embargo por cuestiones de espacio se puede optar por los de dos o de tres niveles.
En el Altar de dos niveles se representa al cielo y al infierno, en el de tres niveles se agrega el inframundo.
En el Altar completo de siete niveles se debe decorar con la fotografía del difunto en la parte más alta que sería el primer escalón, el segundo escalón se deja vacío ya que representa a las ánimas del purgatorio, en el tercer escalón se coloca sal para purificar a los espíritus, en el cuarto escalón se adorna con el tradicional y sabroso pan de muerto, es en el escalón número cinco dónde se depositan los alimentos favoritos del difunto, en el sexto nivel se vuelven a poner fotos del fallecido o de los fallecidos, y en el séptimo y último escalón se coloca una cruz dibujada con semillas o con flores.
Un auténtico Altar de muertos debe contar con: un arco de flores para dar la bienvenida al alma del difunto, un camino de flor de cempasúchil desde la puerta del hogar y hasta el Altar para dirigirlos a su ofrenda, inciensos aromáticos, veladoras, agua, creatividad y mucho amor.
